Para comunicar asertivamente nuestros derechos y opiniones, debemos tomar en cuenta que nuestra comunicación debe contener cuatro elementos fundamentales:
Sentimientos.
Hechos Conducta concreta y
Consecuencias.
Debemos expresar muy claramente los hechos que nos motivan a expresar
nuestra opinión o defender nuestros derechos.
Sentimientos:
Los sentimientos que nos generan los hechos, debemos dejarlos claros
ante nuestro interlocutor o interlocutores, debemos expresar muy claramente lo
que sentimos en estas situaciones. No
debemos dejar ninguna duda sobre nuestros sentimientos.
Además de los hechos, y los sentimientos que estos nos generan, debemos hacer saber cuales son las conductas que esperamos de nuestro interlocutor, o interlocutores.
La comunicación asertiva es precisamente, hacer valer nuestros derechos, y opiniones, en forma clara y concisa, nuestro interlocutor debe saber la conducta que esperamos de él o ella, para que no violente nuestros derechos.
Consecuencias:
El último aspecto que debemos incluir en nuestra comunicación asertiva,
es además de la conducta concreta esperada por parte de nuestro interlocutor,
las consecuencias que generará dicha conducta en beneficio mutuo.
Como ejemplo concreto de lo que es una comunicación asertiva, veamos el
siguiente caso:
Un amigo acaba de llegar a cenar. Pero una hora más tarde de lo que
había dicho. No ha llamado para avisar que se retrasaría. Estás irritado por la tardanza. Tienes estas alternativas:
Saludarle como si tal cosa y decirle: entra, la cena está en la mesa.
Conducta agresiva:
Me has puesto muy nervioso llegando tarde. Es la última vez que te invito.
Conducta asertiva:
He estado esperando durante una hora sin saber lo que pasaba
(hechos).
Me has puesto nervioso e irritado (sentimientos).
Si otra vez te retrasas, avísame (conducta concreta),harás la espera más
agradable (consecuencias)
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